S�bado 8 de diciembre de 2007. Hemos sido testigos por estos d�as de la discusi�n planteada por el presidente de la Confederaci�n de la Producci�n y el Comercio (CPC), con la Presidenta de La Rep�blica junto a algunos de sus ministros, en torno a lo que Alfredo Ovalle defini� como situaciones que reflejan “un deterioro relativo de los elementos esenciales del desarrollo”. Que obedece seg�n este dirigente empresarial a iniciativas de legislaci�n laboral que menoscaban la confianza, a la ideologizaci�n de sectores del movimiento sindical y a la respuesta tard�a del ministro del Trabajo frente a esta realidad.

�Qui�nes son los actores que participan de esta discusi�n? Por un lado empresarios que representan sectores donde la econom�a est� concentrada, o “regulada” por superintendencias que poco gravitan en su quehacer, como son: grandes exportadores agr�colas y forestales, empresas de retail, grandes cadenas de supermercados, bancos e instituciones financieras, la gran miner�a, etc�tera; en resumen aquellos que navegan en la macroeconom�a privilegiada del pa�s. Y por el otro lado est�n algunos ministros muy medi�ticos y demag�gicos, pero poco ejecutivos, que probablemente han de tener m�s de alguna aspiraci�n electoral en el futuro, en que no nos ha de extra�ar que sean sus actuales adversarios en la presente discusi�n quienes ayuden a financiar esas eventuales campa�as.

Me quedo con las palabras inclusi�n y “mantengamos la compostura”, puesto que frente a estos actores, existen observadores que no est�n siendo debidamente representados en esta parodia cupulista, como son las Pymes y sus trabajadores (representan m�s del 80% del empleo en Chile), que se encuentran actualmente en medio del fuego cruzado entre la CPC y la Direcci�n del Trabajo, y que finalmente ser�n los m�s perjudicados.

El desarrollo es tarea de todos los chilenos. Ya pasaron los tiempos en que apunt�bamos a otro con el �ndice, hoy ese dedo acusador debemos dirigirlo hacia nosotros mismos: empresarios, trabajadores, autoridades, dirigentes gremiales, estudiantes. Todos sin excepci�n, debemos desarrollar responsablemente nuestra actividad.